En este mapa
podemos observar los principales yacimientos de icnitas en España:
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Tereñes Asturias,
Ribadesella.
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Costalomo Burgos,
Salas de los Infantes.
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Las
Cerradicas: Teruel, Galve.
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Fuentesalvo:
Soria, Villar del Río.
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El Peladillo:
La Rioja, Igea.
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Los Cayos: La
Rioja, Cornago.
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Tambuc: Valencia,
Millares.
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Fumanya: Barcelona,
Vallcebre y Figols.
La mayoría
de las huellas pertenecen a saurópodos, ornitópodos y torópodos.
SAURÓPODOS
Los saurópodos
(Sauropoda) son un infraorden de dinosaurios sauropodomorfos que vivieron desde el Triásico Superior hasta el Cretácico Superior (hace aproximadamente 210 y 65 millones de años), en
lo que hoy es América, Asia, Europa, África, Oceanía y la Antártida.
Los
saurópodos eran dinosaurios de enormes proporciones, los cuales tenían cuello
largo, una cabeza pequeña, patas gruesas y una cola robusta. Los cuellos de los
saurópodos podían presentar 10 o más vértebras cervicales.
ORNITÓPODOS
Los
ornitópodos (Ornithopoda) son un infraorden de dinosauriosornitisquios
neornitisquios,
que vivieron desde el Jurásico inferior hasta el Cretácico superior (hace aproximadamente 197 y
66 millones de años), en lo que hoy es América,
Asia, África,
Europa,
Oceanía
y la Antártida.
Los
ornitópodos estaban dotados de pies con tres dedos, similares a los de
las aves.
Se trató de uno de los grupos de herbívoros más exitosos de su tiempo. Su mayor
ventaja evolutiva fue el desarrollo progresivo de los
aparatos masticadores más complejos que han existido en reptiles
Los primeros ornitópodos llegaban a medir 1 metro de largo y
probablemente eran muy rápidos. Tenían una cola rígida, como la de
los terópodos,
que ayudaba a balancear sus cuerpos cuando corrían sobre sus patas traseras. Luego, a medida que el período Cretácico
avanzaba, desarrollaron nuevas defensas y llegaron a medir hasta 6 metros.
TERÓPODOS
Los
terópodos (Theropoda) son un suborden de dinosaurios saurisquios caracterizados por tener una dieta
carnívora y el andar bípedo. Los terópodos aparecieron en el Triásico superior (hace 228 millones de años) y fueron los cazadores
terrestres dominantes hasta su extinción en el Cretácico superior (hace 66 millones de años) junto al resto de los
dinosaurios y gran cantidad de la fauna y flora de esa época. Su forma varía
desde pequeños cazadores primitivos de no más de un metro a gigantescos
depredadores de más de 11 metros de largo.
